miércoles, 26 de mayo de 2010

Trivialidades que hacen referencia.

Las diferencias entre tantas vueltas de un mismo rollo fotográfico y entre la mujer de la que me enamore y con la que me acosté hace unos días, pareciera que son aparentemente las mismas, esas que por mera ignorancia desconozco y que por pereza no quiero conocer. La única razón por la que esta existencia inmediata tiene el poder de ser como lo estéticamente posible se muestra día a día, es porque no queda nada más.
En toda esa certeza de los doctos y de los poetas con sus cosas intelectuales sobre el poder de la palabra y la sentencia de los estatutos culturales, yo solo me limito a observar, a ver como se juegan el pellejo por una palabra que les representa la vida. Por mi parte respecto a las palabras que demuestran cosas, solo puedo expresar mi conocimiento de la respiración que llevo a cabo 24/7 y de las cosas que me valen para la vida. Como las sorpresas que me llevo por no callar y las que me llevo por llenarme la boca de silencio respecto a las mismas cosas a la vez.
Todo esto no es un problema filosófico ni nada de eso, es simplemente falta de cosas que hacer en un lapso determinado, como comer por nervios o hacer como que te equivocas de palabras para hacer que una conversación dure más. Cosas que, por mera naturaleza, las haces pensando en un bienestar, o de nuevo, buscando una sorpresa. Coma ayer que conocí y hable con una chica a la cual le escribí un cuento solo porque me gusto su sonrisa al revés, pero nunca me vio y no pude escuchar ninguna palabra de ella, al hablarle, ayer, fue agradable no decepcionarme de su voz y poder notar que interprete bien sus silencios... es como saber algo por mera intuición y creértelo tanto que lo haces verdadero. Últimamente no me equivoco con las personas, debe ser una predisposición a la muerte que no se por qué razón parece más próxima cada día. Como cuando te dicen que debes irte preparando para la guerra cuando esta empiece, pero siempre crees que falta mucho y en realidad no sabes si empezará al día siguiente. Pero venga son trivialidades que hacen referencia a alguna otra cosa, como las analogías en los exámenes de admisión, o como los emparedados que no llevan pan y te sorprenden de la misma manera que la muerte ya mencionada.
Sin mensaje poético y con la convicción de no tener nada mejor que hacer que relacionar cosas que no tienen nada que ver, escribí 7 cuartillas sobre una aguja metida en la vena de un adolecente con los ojos volteando hacia su cerebro, me recordó a un luchador que representa a dios en el ring, excepto que mas estéticamente, y lo imagine metiéndose una aguja también, aunque de nuevo, se miraba mejor que el chico aquel drogándose sin exuberancia de la vida.
Luego pensé en la mirada de las mujeres que no te ven a los ojos, pero sonríen para todo el mundo, pienso que esas pueden matar hasta a sus padres, pero estoy seguro también de que si se enamoran de algún idiota pueden ser lo más débil del mundo, como las lombrices cuando se quedan fuera de la tierra mojada y puedes partirlas en pedacitos y ver como se siguen moviendo al compás de tu respiración. Por mi parte me encantan.
Por alguna razón la paz que me da la compañía de la única familia que no es de mi sangre la conservo hasta el último momento, pues aunque quizá me acabe yo primero, bien valdría que alguien hiciera recorrer mis tonterías más allá de mi estado racional. Como cuando el abuelo muere y pasan generaciones oyendo las mismas historias sobre el abuelo que vomitaba tanto que pudo escribir en un charco de vomito a medio secar, el nombre completo de sus mejores amigos.

Sin mensaje poético. Necesariamente.

4 comentarios:

Consolation Des Arts dijo...

La muerte-certeza...Los muertos- terribles...Los recuerdos-ideas muertas...Aburrimiento-imaginacion muerta..Los fantasmas-esperanza.
Todo da vueltas, también las palabras...
Saludos!

Anónimo dijo...

este no eres tu!

David Navarro dijo...

cuanta muerte qurida...

y si... soy yo... aunque quien sabe quien escribio por mi en ese momento, habra que ver cada cuanto soy yo quien escribe aca, y cuando es otro que como tu, es anonimo.
perdon por las faltas, tengo hueva.

Consolation Des Arts dijo...

asi es querido, ya ves, no quiero perder la costumbre en el momento del telon...
...oye, que confianza...esas no son cosas que si digan nada mas asi ja...que manera de afirmar ser o no ser..Al puro estilo Shakespeare..
Ay, yo no puedo poner acentos..ni modo, igual ya se me olvidaron..Saludos!