viernes, 5 de octubre de 2007

Danzando.

Explicaron la vida como una pelea con la muerte, pero la danza es la palabra.

Y en la danza con la muerte se pierden los seres en los pasos y vueltas que la pareja mística ofrece, el recuerdo que llega durante cada nota es el exacto movimiento de sus caderas filosas balanceándose tan cerca que nunca tocan al ente humano, y de vuelta en vuelta, pasos y pisadas; la muerte conoce el exacto sentido musical del ritmo y la estructura opuesta de su centro equivocado pero perfecto. Exacto en imagen y movimiento pero mas en ambas… mas de frente que detrás; pero mas de frente y detrás.

Una música confusa que dilata el cuerpo y la mente común, pero distinta en cuanto a la percepción inteligente de los demás bailadores. Bailadores y bailarina, ahí esta todo el resumen, los bailadores se acercan a la bailarina con el reto de cansarla, pero nunca de sentarla. Es la danza en la fiesta mas callada, con el ambiente mas blanco y luminoso del universo, es la celebración mas intensa en todo el macrocosmos, es la verdad que hace mentira las mentiras y mentiras las verdades, es la verdad que no es absoluta pero si correcta y definitiva. Su comienzo es la pieza elegida, y el azar del momento en cuanto a la elección.

Una fiesta sin cena y sin licor, solo una danza en la que la mística condena a no terminar al tiempo de la canción, de la pieza, sino al reventar la imagen opuesta a la misma bailarina. El ser que solo baila e intenta llevar el paso menos bochornoso, espera la espalda constante para traicionar y volver a intentar, el baile termina pero solo para el que desaparece, la línea de espera crece y se extiende… es una celebración interminable, llena de vida y pasión mas allá de la reacción.

La bailarina, la mística, la muerte… es el interior asesino y constante del ser que solo piensa.

P.D. la forma de llamar a la muerte: Mística ha sido tomada del buen Benny Rotten.
De la canción “Mística” de Espécimen.

7 comentarios:

Consolation Des Arts dijo...

Vaya, el señor hablando de muerte.
Eso es extraño. Debo reconocer que esta manera de hablar de la muerte fue exquisita. Es cómo un buen vino.No el vino barato y amargo que siempre cae bien a los labios y al alma.
Me parece un escrito lleno de figuras y color. Sí, es diferente a los anteriores, no sabe tanto a yo yo yo. Jugar con las palabras y bailar con la muerte...Y que decir del coqueteo eterno...
Si, tal vez con eso alguien pueda consolarse ante lo irremediable.
Entiendes?

David Navarro dijo...

chin!! pos poquito je*
a ver otra vez?

Anónimo dijo...

No sabía que la muerte bailaba..ni siquiera que tenía nombre..Mística, bonito nombre.

Neural Crash dijo...

Puedes sentir las pequeñas particulas de clima invernal que empiezan a bañar la ciudad al atardecer?
Nostalgicamente exquisitas...

David Navarro dijo...

asi es mi Sonia, pues ese Benny Rotten sabe como darle nombre a las cosas, mistica; esta perron, me gusta mucho. tu tambien podrias ponerle nombre.

Consolation Des Arts dijo...

Oh pues, ahí va otra vez:
Si, tal vez con eso alguien pueda consolarse ante lo irremediable.
Y a eso añade mi frase favorita
Consolation Des Arts...
Ahora si?
Mhhh. Recuerda que los enigmas de esta joven esfinge no son difíciles de resolver.
Esta es una esfinge sin secretos. Ja y aparte vividora del arte, que yo más bien diría, vividora en el arte...
No es cierto...ja

Anónimo dijo...

Pues yo le pondría la inesperada..la ausente..la bienvenida..la no querida..la buscada..la misteriosa..la siempre presente.. hay tantos nombres que podría ponerle..Pero me gusta el de la Mística..se oye místico.